Control de humedad de marihuana

Uno de los principios básicos del cultivo, en concreto la humedad, ocasiona problemas varios y no siempre fáciles de solucionar. No todo el mundo puede disponer, de un cuarto de cultivo climatizado en el que poder controlar todos sus parámetros a voluntad.

La humedad es la cantidad de vapor de agua que se encuentra presente en el ambiente, y su control es imprescindible en cada fase de la vida de las plantas si queremos obtener unos resultados más o menos aceptables en nuestros cultivos.

Medidas de la humedad

La humedad del aire se mide de diversas maneras, la más conocida es mediante la humedad relativa, que es la que nos interesa. Esta es la relación entre la cantidad de agua que posee el aire, humedad absoluta y la máxima cantidad de agua que puede retener el aire con una temperatura dada.

Cultivo de Kraken en indoor

Para que lo entiendas mejor, si la humedad relativa es del 50% quiere decir que a dicha temperatura el aire puede absorber la misma cantidad de agua que ya posee para llegar al 100%. Pero si la humedad relativa es del 35%, es que el aire está muy seco y debe absorber mucha agua para llegar al 100%. Finalmente si la humedad relativa es del 90% quiere decir que el aire está lleno de agua y sólo absorbe una pequeña cantidad de agua para llegar al 100%.

Temperatura más alta, más humedad

El aire retiene más humedad cuanto más alta es la temperatura, y que cuando la temperatura baja, la capacidad de retener humedad también baja, por ello, la humedad relativa es menor a temperatura alta y mayor cuando la temperatura baja.

La humedad del aire afecta directamente el consumo agua por plantas, y por ende las necesidades de riego, con baja humedad relativa, el mismo puede absorber más agua y el gradiente de humedad en las estomas también se acentúa produciendo un incremento de la transpiración y el agua sale de las hojas más rápido aumentando la transpiración.  A mayor humedad del aire, las necesidades de riego son más pequeñas.

Control de la humedad en cultivos indoor

En anteriores ocasiones, la humedad va íntimamente ligada a la temperatura y también necesitamos una ventilación para dicho control. Cuando es muy alta pueden aparecer los temidos problemas de hongos, oídio, plagas, mosca blanca…

Estos problemas en el caso del cultivo ecológico son más difíciles de solucionar que en los cultivos tradicionales. Y éstos precisamente por ser más lentos afectan al desarrollo de las plantas, lo que conlleva a una menor producción por planta, y por supuesto, peor calidad.

Otro efecto de la humedad del aire alta es que las plantas no producen mucha transpiración, y por este motivo no absorben agua por la raíz, reduciendo la absorción de nutrientes del agua, caso del calcio. Y en cuanto al potasio, ya sabemos que este se absorbe de forma activa por la raíz, las hojas y flores, a través de la corriente transpiratoria.

Si tenemos poca transpiración, asociada a una humedad relativa alta, se reduce su efecto en las plantas de forma considerable. Si seguimos manteniéndola muy baja las plantas pueden llegar a cerrar sus estomas.

La temperatura y humedad relativa del aire en el indoor o cuarto de cultivo por lo tanto determinan la correcta absorción de nutrientes. Debe ser homogénea, ya que a distinta temperatura y humedad las plantas se alimentan y crecen de distinta manera.

Un consejo: Un correcto mantenimiento de los sistemas de ventilación, limpieza de las aspas de los extractores, intractores y ventiladores evitará muchos problemas. El polvo que se acumula en las aspas de los rotores hace que vayan más lentos, y trastocan los parámetros que tanto nos hemos esforzado en mantener y malograr los resultados, aparte de que ocasionan más ruido.

Control de humedad de la marihuana

No se debe olvidar que es muy importante mantener un nivel adecuado de humedad en cada fase del cultivo. Durante la fase de enraizamiento debe de estar entre 70% y 80%, para ir bajándola durante el período vegetativo, o de crecimiento a unos niveles  entre un 65% y 75%.

En el caso de los esquejes, la humedad debe mantenerse por encima del 85%, incluso 95%, pero recuerda que los esquejes al principio no tienen raíz y todas sus funciones las hace por sus estomas.

Otro error muy común es abusar del riego durante los primeros días del crecimiento. Sólo debemos regar, y ligeramente cuando la parte superficial de la maceta se haya secado, así dejamos que el resto del sustrato se seque un poco.

Últimos consejos

En el caso que tengas que cultivar con niveles altos de humedad, baja el pH del riego, o en caso contrario súbelo una media de 0.1 punto por cada 5º de humedad de diferencia. Puede parecer una tontería, pero ayuda, ya sabes que más sabe el diablo por viejo que por serlo.