Podar la Marihuana: Tipos de Poda, Cómo hacerlas, Cuidados

En el artículo de hoy vamos a explicar la importancia del proceso de podar la marihuana, los tipos de procedimientos para podar la marihuana, por qué es tan importante.

Podar la Marihuana ¿Por Qué es tan Importante?

Podar la marihuana es un proceso que puede traer muchas ventajas al cultivo de marihuana. Cuando procedemos a podar la marihuana lo que hacemos es compensar el nivel de energía que la planta destina a cada uno de sus recursos. Por un lado, están las hojas, indispensables para la toma de nutrientes y luz y por la otra sus frutos, los cogollos.

Los frutos de la planta requieren de mucho esfuerzo para que crezcan hasta el punto que deseamos. Muchas veces al podar la marihuana lo que hacemos es eliminar hojas de la planta, para que esta no tenga que destinar energía en esta parte y pueda centrar todos sus esfuerzos en la creación de un cogollo central enorme.

¿Qué se Consigue al Podar la Marihuana?

Se consigue “engañar” a la planta. Esta identifica que la punta más alta de la planta es la punta central. Al podar la marihuana indicamos que esa parte central tiene que ser ayudada a crecer más, la planta se da cuenta de esto y como resultado obtenemos un cogollos central de mayor tamaño.

Al podar la marihuana también permitimos que la luz penetre en otras zonas de la planta a las que no llegaba. Con esto, podemos favorecer el crecimiento de partes de la planta de marihuana que se encontraban en una zona oscura.

Por lo que la importancia de podar de marihuana reside precisamente en que podemos dirigir la energía de la planta hacia un propósito concreto. En este caso, obtener mayor producción de cogollos, con mayor cantidad de resina y mejores propiedades organolépticas.

¿En Qué Consiste Podar la Marihuana?

Como habrás podido deducir, podar la marihuana consiste en extraer hojas de la planta para que la planta traslade sus energías a la creación de cogollos de marihuana de mayor tamaño. Además, también sirve para despejar ciertas partes de la planta, que se encontraban a la sombra, y hacer que la luz penetre de forma adecuada para que crezca de forma optimizada.

Para podar marihuana de forma segura, lo mejor es servirse de unas tijeras que te permitirán apurar el corte de cada rama hasta el final. Esto se consigue al cortar con la punta muy afilada y dar amplio margen para ser introducidas entre las plantas.

Podar la Marihuana: Tipologías

Al hablar de tipologías al podar la marihuana a casi todo el mundo le viene a la cabeza estas clases fundamentales: poda apical, FIM, lollypopping o LST, entre otras. Si bien , estas 2 últimas se suelen enmarcar en las acciones de causar estrés a la marihuana para ganar en producción. Lo cierto es que la poda es esencialmente eso, un tipo de acción que altera (estresa) algún patrón natural de crecimiento de la marihuana con el objetivo de incrementar la producción.

A continuación, podrás encontrar una explicación de en qué consisten estas y más formas de podar la marihuana. Cada una está pensada para lograr diferentes objetivos y para tipos diferentes de plantas:

  1. Poda Apical Topping

Podar la marihuana de forma apical puede parecer extrema en un principio, pero no temas a la hora de hacerlo. Para podar la marihuana de forma apical deberás de cortar la punta central de la marihuana. De esta forma, obtienes una bifurcación en el centro del tronco de la planta en forma de Y griega.

Esto favorece que la planta detenga el crecimiento vertical, por lo que le enviamos más energía a las ramas laterales para su crecimiento. Es perfecta si lo que queremos es obtener plantas ramificadas y con baja altura. Se recomienda podar la marihuana de forma apical en situaciones en las que no quieras que tus plantas crezcan hasta el techo.

Esta técnica apical para podar la marihuana se suele hacer con un Scrog, donde contar con más ramas verticales ayuda a que esta técnica sea adecuada. Es una técnica de podar la marihuana idónea si plantamos plantas de larga floración y en exterior también será útil para controlar la altura de las plantas.

¿Cómo y Cuándo hacer la Poda Apical?

  • Reconoce la zona en la que hay que podar la marihuana. Lo normal es podarla cuando la planta aún es pequeña. Lo haremos a partir del tercer nudo de hojas. Tendremos que cortar el tallo central dejando en el tronco 3 pares de ramas. Es importante hacerlo en la fase de crecimiento vegetativo, donde la planta ha reforzado su estructura.

  • Si aparece un hueco en el sitio donde has cortado la rama, lo mejor es que lo tapes para que no se introduzca ninguna partícula que pueda estropearse al podar la marihuana. Un poco de cera de vela es perfecto.

  • Habrá que esperar hasta que crezcan el resto de botes y se identifique como rama central. De esta forma, después de podar la marihuana, la planta distribuirá la producción que iba a dar en una sola punta en 2 puntas distintas.

  • Podemos repetir este proceso de podar la marihuana apical para contar con el mayor número de ramas que la planta identifica como centrales, con mayor proliferación de cogollos. En interior, como mucho, podremos hacer esta técnica de podar la marihuana de forma apical hasta en 2 ocasiones, mientras que en exterior, podremos hacerla hasta 7 veces.

  1. Podar la marihuana FIM (Fimming)

Esta técnica de podar la marihuana es similar a la poda apical. Esto se debe a que en ambas técnicas es preciso cortar el brote superior. No obstante, existen diferencias, porque en lugar de extraer el brote entero, cortaremos el 80% del mismo. De esta forma, dejamos una parte del brote y no aparece ese hueco que teníamos que tapar al podar la marihuana apical.

El objetivo de este procedimiento para podar la marihuana es obtener de 4 a 6 brotes nuevos principales en la parte superior de la punta. Es la forma más sencilla de aumentar la producción de la marihuana con una sencilla incisión. Es importante enfatizar la necesidad de no cortar todo el brote, puesto que de lo contrario, estaremos haciendo una poda apical.

El procedimiento de podar la marihuana FIM es muy útil para incrementar la producción de esquejes en las plantas madres. Así, cuando plantamos un esqueje para conseguir una madre nueva, podemos hacerle un FIM y obtener el mayor número de brotes posibles desde el comienzo del cultivo.

  1. Podar las Ramas Bajas de la Marihuana (Lollipopping)

Acabamos de ver las técnicas de podar la marihuana en sus zonas superiores. Pero existen técnicas de podado que buscan precisamente lo contrario, cortar las ramas bajas para concentrar la producción en la punta, también conocido como lollipopping.

Así, existen variedades de marihuana, como la Critical, que crecen en forma de ciprés. A estas variedades no les debemos cortar el brote central, sino intentar concentrar la producción es esta parte. Para ello, debemos de podar la marihuana de las ramas de la parte lateral, con el objetivo de que la luz penetre de forma adecuada, obteniendo como resultado una planta con aspecto de piruleta.

Como los cogollos que salen en la parte inferior de la planta suelen ser de peor calidad, ya que la luz no incide tanto, lo que aseguramos al podar la marihuana lollipopping es una producción de cogollos mejores. Al incidir la luz de forma homogénea, el resultado de la producción también lo es. Librándote esos cogollos vacíos de las zonas inferiores de la planta.

¿Cómo Hacer un Lollipopping?

  • En primer lugar, examinaremos las zonas de la planta que no están bien iluminadas y que podemos prever que darán cogollos menos densos. Esto lo haremos antes de que la planta entre en floración.

  • A continuación, procedemos a podar la marihuana quitando estas partes, con cuidado de no dañar las zonas de la planta que queremos dejar. Nunca más del 50% de la planta.

  1. Podar la Marihuana LST

El LST (Low Stress Training) es una forma de podar la marihuana orientando el crecimiento de la marihuana a través de guías. De nuevo, el objetivo es llevar la luz a las zonas de la planta que queremos optimizar. En esta ocasión debes doblar las ramas de la planta utilizando cordeles. La parte en la que tendrás que podar la marihuana será en el mantenimiento.

El objetivo de esta técnica es aumentar el crecimiento de las ramas secundarias y aumenta la exposición total de la planta a la luz. Esto genera cogollos de gran tamaño y uniformes repartidos en las partes bajas de la planta, en lugar de crear una cola de marihuana en su parte central. Es el método para podar la marihuana perfecto para aprovechar al máximo la luz que incide en la planta.

El LST es una buena forma de ocultar una planta de marihuana que pueda ser vista en un cultivo exterior, por ejemplo. De esta forma, la planta de marihuana adquiere un aspecto curioso, mucho más horizontal y grandes colas de marihuana repleta de cogollos homogéneos. Cuando aparezcan hojas o ramas que puedan obstruir la luz tendremos que podar la marihuana en estas partes.

¿Cómo y Cuándo Hacer un LST?

  • Para podar la marihuana LST comienza por doblar el tallo principal hasta romper la dominancia apical y que este pueda ser maleable hacia el lado al que queramos orientar la planta. Esto lo tendrás que hacer cuando la planta está en estado vegetativo, puesto que será más sencillo.

  • Para que la planta tenga el crecimiento horizontal tendrás que atarla con cuerdas al borde de la maceta. Estableciendo la forma base en la que crecerá la planta.

  • Tendrás que asegurarte de que las nuevas ramas que crecerán verticalmente son homogéneas y crecen a la misma altura.

  • En general, es una técnica que requiere bastante mantenimiento, ya que deberás guiar el crecimiento de la planta para que la luz incida lo mejor posible.

  1. Podar la Marihuana al Pizzicato

Esta técnica de podar la marihuana consiste en aplastar con los dedos los brotes centrales de cada rama de la planta. Con este tipo de técnica favorecemos el desarrollo de las ramas laterales de la planta al frenar el crecimiento vertical de la misma. Esto le da a la planta una forma similar a la de un arbusto.

Cuando vayas a podar la marihuana de esta forma, la planta necesitará de unos días para cicatrizar y formar un bulto en el sitio donde hayas pellizcado el brote y continuará con su crecimiento habitual. Es una buena forma de obtener una planta de altura homogénea lo que aumentará la cantidad y calidad de producción final.

Esta técnica requiere de experiencia y cuanto más la utilices, más efectivo serás con ella. Cuando lo hayas hecho en  un par de ocasiones o más, cogerás rapidez con esta forma de podar la marihuana a base de pellizcos o pizzicato, por su similitud con la técnica musical.

¿Cómo Pellizcar la Marihuana?

  • Para hacer este método de pellizcar la marihuana tendremos que localizar los brotes centrales de cada rama y pellizcarlos sin llegar a romperlos, de forma que mantengamos intactos los brotes de los laterales.

  • Para ello, deberemos apretar con el pulgar y el índice de forma delicada hasta que escuchemos al brote hacer un ligero crujido.

  • Durante el crecimiento deberemos ir repitiendo este proceso de podar la marihuana en el tallo del nudo superior de la planta.

  1. Podar la Marihuana: Super Cropping

Esta técnica de podar la marihuana Supercropping tampoco implica cortes, sino que en este caso tendremos que redirigir el crecimiento de las plantas a base de crujirlas fomentando el crecimiento vertical de las ramas más próximas al tallo central.

De esta forma, la poda apical no es la única manera de podar la marihuana favoreciendo la ramificación de la marihuana. Esta técnica no utiliza cortes, pero se categoriza como forma de podar la marihuana al manipular su estructura para obtener mejores rendimientos.

Esta técnica de podar la marihuana implica la rotura de fibras vegetales con el objetivo de corregir el crecimiento la planta utilizando bridas. Hay que tener cuidado al ejercer la presión para doblar el tallo, ya que si nos pasamos podemos llegar a romperlo por completo.

¿Cómo Hacer un SuperCropping?

  • En primer lugar, para hacer esta forma de podar la marihuana, tendrás que seleccionar las ramas que quieras doblar.

  • Sujeta la rama con el índice y el pulgar y comienza a doblar la rama ligeramente para romper las fibras superficiales.

  • Dobla la rama en la posición deseada y sujétalo con una brida a la superficie de la tierra o la maceta.

  • Si ves que la rama ha quedado demasiado suelta, siempre puedes reforzarla con un poco de cinta adhesiva.

  1. Podar la Marihuana RIB

Dejamos esta forma de podar la marihuana para el final porque no es 100% una técnica de poda. Más bien, tenemos que quemar la planta de marihuana con las luces. Sí, has oído bien, esta forma de podar la marihuana consisten en quemar los pistilos de los cogollos de la parte superior de la planta generando una especia de cáncer para planta.

Estas paredes celulares permanecen quemadas haciendo que se multipliquen sus células. Como consecuencia, se crean nuevos brotes que producirá cogollos sin hojas. Esto favorece un incremento en la cantidad y calidad de la cosecha.

Se recomienda podar la marihuana utilizando el método RIB (Ready, I burn) en híbridos de Sativa/Índica con floraciones largas, ya que este tipo de poda se hace en las planta en floración.

¿Cómo Podar la Marihuana RIB?

  • Tendremos que esperar a que la planta llegue a la etapa de floración, al menos unos 20 días, siendo ideal que lleven hasta 60 días de floración.

  • Con un mechero, procedemos a quemar los pistilos superiores de la planta. Siempre con cuidado de excederse.

  • Tendremos que esperar a que la planta active las hormonas que reaccionarán repoblando de forma masiva estas zonas afectadas. Dando lugar a producciones masivas.

Conclusión de Podar la Marihuana

No importan el método que utilices para podar la marihuana, siempre deberás de hacerlo con mimo y respetando a la planta, ya que sino todo el trabajo no habrá servido de nada. Y lo más importante, habremos echado a perder toda la producción. A la hora de podar la marihuana hazlo con detenimiento, tómate tu tiempo en encontrar los sitios de la planta donde más conviene realizar la poda.

Es un proceso que se va perfeccionando con la experiencia. No vas a convertirte en un maestro en podar la marihuana el primer día. Pero poco a poco, observarás como los buenos resultados se hacen realidad y tus plantas crecen más saludables y ofrecen mayores producciones.